Dr. Pablo Odeley Puente Fumero
Medico de Urgencias
En los últimos 30 años el gasto farmacéutico español supera la media europea, en un promedio de aproximadamente 40% por sobre el promedio de la región, tanto que para el 2012, España era el octavo país con mayor prescripción de opioides, y el quinto de ansiolíticos [1].
Opioides
Los opioides, son fármacos alcaloides naturales, semisintéticos o sintéticos (como la morfina, heroína o metadona), que producen analgesia de allí deriva su uso médico, sin embargo, debido a la capacidad de estimular vías neurológicas implicadas en la gratificación rápida y el placer a nivel del sistema nervioso central también pueden ser considerados drogas de abuso [2–4].
Los opioides como un problema sanitario en el mundo y la región.
Debido a su gran poder adictivo, los medicamentos y derivados opioides han generado una gran carga sanitaria económica y social en diversos países del mundo, quizas siendo Estados Unidos uno de los mayores exponentes de este problema [5,6]. La situacion de los últimos años evidenciada en este país podría haberse reproducido en países del entorno europeo, como Portugal el cual vivió una crisis relacionada con el tema la cual ha ido lidiando por más de 20 años [7].
El problema de los opioides en España.
En la comunidad de Madrid en el periodo de 2004 a 2014, el consumo de opioides se triplico [8]. A nivel general en España, según el estudio EDADES (Encuesta sobre alcohol y otras drogas) de 2017, en el que se entrevistaron a mas de 21.000 personas, se determinó que casi el 17% de los encuestados había usado opioides alguna vez y casi el 7% en el último año, y cerca 3 de cada 100 en el último mes [9]. El opioide preferido por los españoles parece ser la codeína, seguido del tramadol y el fentanilo, representando en conjunto más del 87% del consumo, de los opioides fuertes la morfina es el predilecto. Habitualmente el consumidor regular lo hace por mas de dos meses, y suelen ser personas mayores de 30 años [8,9].
Desde el punto de vista médico el consumo de estos productos se suele limitar a unidades de cuidados paliativos [8], sin embargo, resulta preocupante que al menos 1 de cada 10 consumidores, no tenían una receta propia que justificaba el uso de medicamentos, por lo que consumían fuera de control médico directo, y aunque es un valor menor al de otros países en crisis como en EEUU, es un signo de alarma ya que al menos el 7% de las personas obtuvieron el opioide de forma fraudulenta (habitualmente mediante un amigo o familiar) directamente de una farmacia, situacion que representa un alto riesgo y merece un análisis minucioso por parte de las autoridades competentes [9]. Sobre todo, si se considera que los riesgos de sobredosis, reacciones adversas y los impactos sociales derivados del abuso aumentan de manera drástica en ausencia de seguimiento médico [5,6,10].
En España con la intención de abordar de forma preventiva el problema, se ha puesto en marcha desde 2017 el “Plan Nacional Sobre Drogas”, el cual ha puesto en consideración interrogantes sobre el consumo de estas sustancias en el territorio [9]. Sin embargo, quizas sean necesarias otras medidas que permitan limitar el consumo y asi reducir el riesgo de abuso.
Ansiolíticos
Son fármacos diseñados para deprimir la actividad del sistema nervioso central, estos pueden tener un efecto sedante o hipnótico los más comunes son las benzodiacepinas, todos estos fármacos son muy diversos tanto estructural como funcionalmente ya que estos pueden ejercer su acción de diversas maneras sin embargo todos pueden producir disminución de la ansiedad, o sedación [2].
El abuso de ansiolíticos
Estos fármacos al igual que los ya mencionados opioides, tiene un alto potencial de abuso, debido a que estimulan centros del placer haciendo que los mismos puedan generar dependencia o adicción [2].
El tipo de dependencia que crean estos fármacos es similar y en la mayoría de los casos se representa como una dependencia física que suele estar relacionada a otros problemas de abuso de sustancias, por lo que el abuso de ansiolíticos suelen ser drogas secundarias, sin embargo no por esto su abuso es menos importante, ya que tienen una alta relación con crímenes como la sumisión química, y su abuso deriva en problemas sociales de diversa índole, además de producir desadaptación e impactar de forma negativa en la vida del individuo [2,11].
España como bastión del abuso de ansiolíticos
En conjunto con Portugal y según datos de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), España representa el país con mayor consumo de ansiolíticos obtenidos de manera ilícita, éste, aumentó al menos en un 4,5% en la última década [12]. El problema no recae solo en la ilegalidad del consumo, también se estima que estos son uno de los medicamentos bajo prescripción más consumidos en España, incluso dentro del grupo de adictivos son de los primeros, siendo las más ingeridas luego del alcohol y el tabaco [13]. La prescripción médica de estos fármacos ha subido casi un 5%, en el periodo de noviembre de 2020 a 2021, en total fueron recetadas mas de 50 millones de cajas de ansiolíticos [14]. El problema de este grupo de fármacos en España y en Europa pudiera ser comparable a la crisis de opioides presente en EEUU. Para inicios del milenio el consumo había pasado desde 39,71 dosis diarias por 1.000 habitantes por día en 1995, a 62,02 en 2002 y en la actualidad supera los 90 [14,15]. El aumento considerable del consumo en los últimos 25 años ha favorecido a la dependencia y adicción fundamentalmente de benzodiacepinas e hipnóticos como alprazolam, lorazepam, lormetazepam y zolpiden. Es necesario que este problema sea abordado ya que los datos de consumo de España y de Europa en general son similares y en todo caso alarmantes [16].
¿Cuál es el camino a seguir?
Es necesario un mayor control gubernamental de estos fármacos, quizás un sistema único de registro para la prescripción o el seguimiento, así como mayor formación a los médicos para reducir las indicaciones solo hasta que sean necesarias, ya que en el contexto español son comunes los pacientes que tienen tanta dependencia, que llegan a solicitar el mismo medicamento varias veces al día a diferentes médicos, y como no existe un sistema único de prescripciones muchas veces solo se detectan varias semanas después cuando las farmacias informan. Es importante recordar que en los ultimo año aumentaron significativamente las agresiones a profesionales en España, y un 40% de ellas están relacionadas a las negativas de los médicos a prescribir de manera indiscriminada este tipo de medicamentos. Para evitar enfrentarnos a situaciones de este tipo en el futuro y para evitar tener la generación zombi es importante un control gubernamental inmediato sobre estos medicamentos.
Bibliografía
1. Simó Miñana J. Utilización de medicamentos en España y en Europa. Atención Primaria [Internet] 2012;44(6):335-47. Disponible de: https://linkinghub.elsevier.com/retrieve/pii/S0212656711004082
2. Brunton LL, Knollmann BC, Hilal-Dandan R. Goodman & Gilman’s: the Pharmacological Basis of Therapeutics, 13e. New York, N.Y.: McGraw-Hill Education LLC.; 2018.
3. Boom M, Grefkens J, van Dorp E, Olofsen E, Lourenssen G, Aarts L, et al. Opioid chronopharmacology: influence of timing of infusion on fentanyl’s analgesic efficacy in healthy human volunteers. J Pain Res [Internet] 2010;3:183-90. Disponible de: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3004635/
4. Cardoso-Ortiz J, López-Luna MA, Lor KB, Cuevas-Flores MR, Flores de la Torre JA, Covarrubias SA, et al. Farmacología y Epidemiología de Opioides. Revista bio ciencias [Internet] 2020;7. Disponible de: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_abstract&pid=S2007-33802020000100104&lng=es&nrm=iso&tlng=es
5. Manchikanti L, Helm S, Fellows B, Janata JW, Pampati V, Grider JS, et al. Opioid epidemic in the United States. Pain Physician 2012;15(3 Suppl):ES9-38.
6. Skolnick P. The Opioid Epidemic: Crisis and Solutions. Annu Rev Pharmacol Toxicol 2018;58:143-59.
7. Linde P. Cómo se convirtió Portugal en un referente mundial en la regulación de las drogas [Internet]. El País2019; Disponible de: https://elpais.com/sociedad/2019/05/02/actualidad/1556794358_113193.html
8. Ruiz-López D, Alonso-Babarro A. Consumo de opioides en la Comunidad de Madrid (España) entre 2004 y 2014. Revista Clínica Española [Internet] 2019;219(7):367-74. Disponible de: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0014256519300712
9. Regueras E, Guzmán JL. ¿Cómo es el uso de medicamentos opioides en España? Análisis de los datos de la encuesta EDADES 2017. 2021;
10. Carballo JL, Coloma-Carmona A, Mrozowicz-Gaudyn D, Vidal-Arenas V, Hofstadt C van-der, Rodríguez-Marín J. Evaluación psicológica del abuso de fármacos opioides. Papeles del Psicólogo [Internet] 2016;37(1):45-51. Disponible de: https://www.redalyc.org/journal/778/77844204006/html/
11. Folgar MI, Boubeta AR. Drogas facilitadoras de asalto sexual y sumisión química. Salud y drogas [Internet] 2015;15(2):137-50. Disponible de: https://www.redalyc.org/pdf/839/83941419005.pdf
12. Informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefaciente [Internet]. 2020; Disponible de: https://unis.unvienna.org/pdf/2021/INCB/INCB_Report_S.pdf
13. Jeremías C, Sánchez E, Ruiz I, Galván J, Roquer M, Zayas P. Uso y abuso de los ansiolíticos y antidepresivos. 2017; Disponible de: http://diposit.ub.edu/dspace/handle/2445/114220
14. Andrés M de. España encabeza el consumo de ansiolíticos en Europa [Internet]. La Razón2022; Disponible de: https://www.larazon.es/sociedad/20220213/ke3zpasukza3taihsc7tconsxa.html
15. García del Pozo J, Abajo Iglesias FJ de, Carvajal García-Pando A, Montero Corominas D, Madurga Sanz M, García del Pozo V. Utilización de ansiolíticos e hipnóticos en España (1995-2002). Revista Española de Salud Pública [Internet] 2004;78(3):379-87. Disponible de: https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_abstract&pid=S1135-57272004000300007&lng=es&nrm=iso&tlng=en
16. Vicente Sánchez MP, Macías Saint-Gerons D, Fuente Honrubia C de la, González Bermejo D, Montero Corominas D, Catalá-López F. Evolución del uso de medicamentos ansiolíticos e hipnóticos en España durante el período 2000-2011. Revista Española de Salud Pública [Internet] 2013;87(3):247-55. Disponible de: https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_abstract&pid=S1135-57272013000300004&lng=es&nrm=iso&tlng=es
Excelente